yastamos

nada, que dada la galopeanteidad de la crisis y todas esas mandangas,me se ha ocurrido de intentar otras nuevas formas de engañar al cliente aprovechando las ventajas de la ciencia y, sobretodo, su gratuidad. voy a intentar relatar cada cierto tiempo la apasionante vida de un remendador de muebles viejos, su lucha infatigable con telarañas, fósiles de cagaditas de ratones, mugres centenarias, tenacidad de cajones, puertas, cerraduras y demás, que olvidan su natural emplazamiuento para mellar la voluntad del susodicho, reconociendo, eso sí, que la lucha de éste sería más jodia si no contara con inestimable compañia de la CARCOMA, verdadera protagonista de este circo, tema de todas las interacciones que este aventurero de sótanos y desvanes mantiene con el mundo exterior, osea, los clientes. sin ella se vería relegado a hablar ,del tiempo y por ahí no pasa. intentaré también acompañar los comentarios con fotos de antes y después, trucadas por supuesto, pero sin que se note, y si alguien tiene dudas o preguntas sobre restauración, antigüedad, autenticidad, valoración o lo que sea sobre muebles u objetos antigüos, se le ayudará en lo que se pueda. lo dejo por hoy, que bastante esfuerzo me ha costado llegar hasta aquí, que soy del siglo pasau...